Tour Nórdico III: Lund

Al día siguiente nos tocaba coger el tren de nuevo para ir a ver la ciudad universitaria sueca por antonomasia: Lund. Teníamos que coger el típico tren que te lleva a Copenhague, y tras 3h de viaje, nos encontramos allí con Erika, compañera de Erasmus de Ana en Viena, que ya había terminado y así nos visitaba de nuevo. Esta vez no hubo problemas con el tren.

Al salir de la estación, llegamos en 2 minutos al hostal, puesto que era un tren en una via abandonada y habilitado para ser hostal. Era el único de Lund y además Ana estaba encantada por lo bonito y acogedor que era. Eran las 11 ó las 12, y preguntamos si podíamos dejar el equipaje, y dijeron que sin problemas, que ahora no podíamos hacer el check-in, y que lo hiciéramos más adelante, a partir de la 1. Cogimos entonces, y nos fuimos con Erika a que nos enseñara Lund.



Fuimos directamente al centro de la ciudad, donde estaban algunos de los edificios de la Universidad, junto a la catedral, todo completamente rodeado de parques, árboles y verde. Mucho verde. Es el encanto natural de Suecia.





Entramos también a la Catedral de Lund, bastante sucia, la verdad. No sabemos desde cuando no la limpian. Creo que... nunca. :P




¡Con otro relo astronómico como el de Praga! A alguien le suena, ¿no?



Después de la catedral, Erika nos llevó a visitar más edificios, concretamente, la Biblioteca de la Universidad, rodeada completamente de hiedra.





Por dentro era espectacular. Inmensa, y estaba decorada del siglo XIX o algo, porque se la veía bastante antigua, pero muy cuidada eso sí. Compara eso con las universidades españolas... A las 14h ya habíamos visto casi toda la ciudad, y nos fuimos a la plaza del mercado a comer algo. Estuvimos viendo unos restaurantes y nos pusimos a comer en uno que parecía tener buen menú.





Después de comer, nos fuimos a echar una siesta al... cementerio de Lund. Sí, puede sonar así de raro; pero aquí son parques bien grandes y bonitos, y además el Jardín Botánico está justo al lado...








Después de estar un rato echados, empezó a llover, así que aprovechamos para ir un poco de tiendas, a ver si veíamos algo de ropa, y luego nos fuimos a tomar un café a media tarde, antes de que Erika se tuviera que volver a casa. :)



Después de ello, volvimos al hostal a hacer el check-in, y cuando llegamos... nos dicen que a ver si tenemos suerte y quedan habitaciones libres. ¿¡Cómo!? Si hicimos reserva para tener una habitación juntos. En ese momento nos dicen que se tenía que hacer el check-in de 1 a 5, pero no nos habían dicho nada. Por lo tanto, nos buscaron camas libres y nos dieron dos literas en dos habitaciones diferentes... Y luego, a la hora de verlas... tela como era el tren.




A Ana le tocó en la litera de arriba del todo, imposible para subir, y más aún para bajar como te hayan recogido la escalera... (que le pasó también). Para ducharse, eran X minutos (o segundos, no recuerdo) de agua caliente por 5 SEK, y salía la ducha también por un pico. La cena y el desayuno, en una cocina que no sé si se le podía llamar así... Vamos, horrible horrible. Yo para colmo, tuve que dormir con la maleta en mi cama, porque no había espacio para dejarlas todas, y dormí fatal.

Al día siguiente, cogimos y a las 8 de la mañana nos largamos en dirección Malmö. Esperábamos al menos que ese hostal fuera mejor que éste. El peor en el que he podido estar en toda mi vida.

P.D: Aún recodaré la bordería de la chica que nos atendió... y como Ana dejó embozado el baño esa misma noche cuando lo usó, rebosando agua y lo que no era agua por todos los lados. Qué gracia le haría a la colega por tener que limpiarlo al día siguiente... xDDD